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Trump pone “píldoras envenenadas” a renegociación del TLCAN-NAFTA

Renueva sus amenazas imprudentes para retirarse totalmente de este acuerdo comercial.


PRIMITIVO López | MRLNews

LAREDO, Texas.- «En la última ronda de negociaciones del TLCAN-NAFTA, el Presidente Donald Trump ha parecido más interesado en poner «píldoras venenosas» y renovar amenazas imprudentes para retirarse totalmente de este acuerdo comercial mutuamente beneficioso, en lugar de trabajar con nuestros aliados y vecinos internacionales para encontrar soluciones que ayuden directamente a la producción y trabajo.

Esta declaración es de Henry Cuellar, congresista federal por Laredo, por donde se realiza el 40 por ciento del intercambio comercial Estados Unidos-México.

EL TLCAN representa una oportunidad real para que la Administración Trump haga progresos significativos en las negociaciones esenciales, apo8nta Cuellar.

«A pesar del enfoque no cooperativo de algunas de las propuestas de política de nuestra Administración, nuestras contrapartes en México y Canadá todavía están negociando con nosotros en plena fe. Y, para su crédito, nuestra Administración ha avanzado en la limitación de los aspectos más extremos de las propuestas del Presidente Trump”, destaca el legislador.

Y agrega: “sin embargo, incluidas disposiciones como extremos sobre las normas de origen, un vencimiento de la extinción de cinco años sobre cualquier acuerdo y la eliminación de un mecanismo eficaz de resolución internacional de controversias son propuestas que no darán lugar a una nueva era de cooperación. Más bien, conducirá a una mayor desconfianza entre nuestros socios comerciales segundo y tercero”.

Cuellar dice que ha hablado con líderes en Canadá y México en múltiples ocasiones y “constantemente me han reiterado un punto: quieren trabajar con nosotros, pero tienen que poder vender cualquier acuerdo a los Legislativos en sus países de origen”.

«Espero que la Administración Trump se dé cuenta de que la negociación sin previsión no sólo afecta negativamente a nuestra economía, es un retorno a un enfoque de pánico ante la globalización y afecta negativamente los puestos de trabajo de la fuerza laboral del siglo XXI que dependen en gran medida del ingenio estadounidense”, expresó.

“ Nos guste o no, el mundo se está globalizando. La pregunta ahora es ¿vamos a ser el país que lidera este cambio? ¿O vamos a tomar un asiento trasero porque nos negamos a dejar de lado nuestras diferencias con nuestros más grandes aliados comerciales?».